Además del cepillado diario y la limpieza dental periódica, otra parte fundamental en el objetivo de tener una dentadura sana es el uso del hilo dental.
La idea es llegar a los más recónditos lugares entre los dientes y las muelas, para deshacerse de la placa y el sarro que desencadena las bacterias.
Y si alguna vez te has preguntado cuál es la mejor opción, resolveremos tu inquietud explicándote cuáles son los tipos de hilos dentales y cómo usarlos.
Tipos de hilo dental y sus usos
Cada boca es diferente, y lo que funciona para una no funciona para otra, es por eso que debes ubicar cuál es el tipo de hilo dental que más se ajusta a la tuya.
Veámoslos y luego te sugerimos consultar con tu odontólogo sobre cuál es el más adecuado en tu caso.
Hilo dental encerado
Este hilo dental viene con una capa de cera aplicada que impide que se deshilache con demasiada facilidad y, a su vez, facilita el deslizamiento entre los dientes.
Ahora bien, la capa de cera sí que lo hace un poco más grueso que otros, lo cual hace que en ocasiones se necesite insistir repetidamente para que pueda ingresar en un espacio estrecho de la dentadura.
Igualmente, debido a su naturaleza cerosa el usuario puede tener alguna complicación mínima en el agarre, pero nada grave que no se pueda solucionar con el uso continuo.
Hilo dental sin cera
Este es uno de los hilos más comunes que las personas suelen utilizar y es fabricado en un material de nylon, sin saborizantes artificiales, es decir, no contiene productos químicos.
Es un hilo dental que puede ser usado por personas con dientes muy juntos, debido a que se puede maniobrar fácilmente en espacios reducidos, aunque al no tener una capa protectora de seda, es más propenso a deshilacharse o romperse.
Quienes presentan pequeños espacios entre los dientes también pueden usarlo, al ser más fino que otros tipos de hilos.
Cinta dental
La cinta dental es similar a los hilos dentales, con la única diferencia de que presenta una estructura más plana que la hace mucho más gruesa que cualquier otro hilo dental.
Evidentemente, debido a su grosor, no es adecuada para todo tipo de dentaduras, ya que, por ejemplo, su deslizamiento suele ser poco fluido en dientes apiñados.
Por su parte, este tipo de cintas dentales las puedes encontrar en el mercado con o sin cera.
Seda de PTFE
Si te preguntas qué es el PTFE, te contamos que se trata del politetrafluoretileno, es decir, un material que se utiliza para fabricar tejidos gore-tex, el cual resulta bastante eficaz para deslizarse entre dientes apretados.
Sin duda, este es un material bastante resistente, por lo que no tendrás que preocuparte de que se rompa o deshilache mientras lo usas.
Eso sí, en su fabricación también se usa el ácido perfluorooctanoico, un carcinógeno conocido; de modo que, su uso prolongado no es del todo recomendable.
Irrigador dental
También es posible retirar los restos de alimentos que se encuentran entre los dientes, con un chorro de agua a presión, y para eso puedes usar un irrigador dental.
Este tipo de hilos se están volviendo muy populares, gracias a que son fáciles de usar, eficaces para eliminar la placa, pero sobre todo reducen la gingivitis y el sangrado gingival.
No olvides consultar con tu odontólogo cuál es tu tipo de hilo dental
