Una persona puede decir mucho con solo una sonrisa, pero aún más ocultándola. Y cualquiera de estos dos resultados depende, en buena medida, de la rutina dental.
Una rutina que debe combinar una dieta baja en azúcar, visitas regulares al odontólogo, productos dentales y, sobre todo, un tratamiento con el ingrediente clave: ¡El flúor!
¿Sabías que el flúor es el eterno amante de los dientes? ¿Conoces todo lo que el flúor hará por tu dentadura?
Es momento de que descubras todos los beneficios que este mineral te puede brindar, para que presumas una buena salud dental.
¡Vamos a ello!
¿Qué es el flúor?
Si alguna vez te has preguntado cuál es el alboroto con el flúor, por qué tu pasta dental y tu enjuague bucal lo contienen o por qué los odontólogos lo utilizan, necesitas conocer un poco más sobre este mineral.
El flúor o fluoruro, como también se le conoce, es un mineral incoloro, de origen natural, que se encuentra en toda la superficie de la tierra, en forma sólida, líquida y gaseosa.
En el mundo de la odontología, se ha comprobado que su aplicación en dosis pequeñas, fortalece los dientes, previene la caries y promueve el proceso de remineralización que hace más fuerte el esmalte.
¿Qué beneficios aportará el flúor a mi dentadura?
Es mucho lo que el flúor puede hacer por tu dentadura, así que veámoslo:
- Cuando usas una pasta de dientes, un enjuague o un dentista aplica el flúor directamente sobre la superficie de tus dientes, este se combina con la saliva y te brinda una protección continua contra las bacterias.
- Cuando se aplica la cantidad correcta en niños menores de 7 años, la estructura real del esmalte se fortalece y se hace más resistente a los ácidos.
Esto se traduce en una menor vulnerabilidad de los dientes a las bacterias y a las caries de por vida.
- El flúor también es capaz de proteger tus dientes a través de la remineralización.
¿Y qué significa esto?
Cuando la placa se acumula sobre y alrededor de los dientes, las bacterias carcomen y debilitan el esmalte al extraer minerales vitales.
Y al usar flúor, se activa un proceso de remineralización que hace que el esmalte se haga más fuerte.
- El flúor también bloquea algunas de las enzimas más dañinas que se encuentran en la placa, y de esa forma evita que se produzca el ácido que debilita los dientes.
- Las personas que padecen de Xerostomía o Sequedad de Boca, son más propensas a la caries dental, por lo que, un tratamiento bucal con flúor, les ayudará en la neutralización de los ácidos y eliminación de partículas.
- Previene las enfermedades de las encías como la gingivitis o la periodontitis.
- Previene la pérdida prematura de los dientes.
Suficientes razones para empezar a darle a tu dentadura una dosis adecuada de flúor